El aclareo de frutos es una tarea fundamental
y necesaria para obtener una producción
de calidad.
Un buen aclareo da como resultado en el
fruto un gran tamaño, una mejor coloración,
una maduración más precoz,
uniforme y una mayor nutrición en
la planta.
El no aclareo da como consecuencia un fruto
de baja calidad y además esforzamos
al árbol pudiéndole ocasionar
la rotura alguna de sus ramas por exceso
de peso y otro motivo es el que producimos
un agotamiento de todas sus reservas que
puede perjudicar en la producción
del año siguiente.
El mejor momento para el aclareo es cuando
el fruto a obtenido el tamaño de
una avellana y después de la caída
de los pequeños frutos no fecundados.
El aclareo se realiza manualmente dejando
un fruto cada 15 o 20 cm. en cada ramificación
y eliminando el resto arrojándolo
al suelo.
Se trata que en el punto final del crecimiento
del fruto no se lleguen a tocar unos a otros
en el árbol.
Al considerarse una tarea bastante entretenida
y costosa el agricultor se ve en la obligación
de precisar de personal que menudamente
suelen ser inmigrantes que para esta temporada
suelen aparecen en busca de trabajo.
ACLAREO DE FRUTALES DE PEPITA
El aclareo también como las otras
frutas es fundamental y necesario para obtener
una buena calidad de fruto.
Una de las ventajas es que las frutas de
pepita como son la manzana y la pera, su
aclareo se realiza con productos hormonales
que facilitan un aclareo rápido y
preciso sin prescindir de personal.
La fructificación de los frutos de
pepita se producen en forma de corimbos,
que da lugar a dos o tres frutos o más
en un ramillete, estos productos químicos
hacen que solo queden un fruto en cada ramillete
deshaciéndose del resto.
Las dosis y el momento adecuado de su tratamiento
dependerán de la variedad y circunstancias
personales.